El mirar sin estar viendo, conlleva el uso exclusivo de la mente. Y alguien podría preguntarse, ¿pero como es posible que puedas mirar sin ver? Pues, mi respuesta a dicha cuestión es que, como especie, nos acostumbramos tanto al solo ver, que el mirar ha quedado relegado en un lugar llamado "Olvido". Si, es posible mirar sin estar viendo, es posible usar el poder mental de cada uno de los integrantes de nuestra especie para mirar lo que la vista no puede ver, es posible mirar tan lejos que ni siquiera podríamos ver lo mismo usando la vista pegada a ambos óculos de un binocular, es posible mirar incluso desde lo más pequeño hasta lo majestuoso e inconmensurablemente grande, es posible mirar tan lejos que ningún telescopio de ningún tipo lo podrá ver, es posible mirar trasgrediendo los límites del tiempo y del espacio para determinar objetivos que existen en el pasado como los que nos esperan en el futuro, es posible mirar el mismísimo origen del Universo desde lo que le precedió en su Génesis hasta el Multiverso contenedor de infinitos universos iguales o diferentes al "nuestro", es posible mirar más allá del Multiverso y comprender que la "Nada" tiene el mismo derecho lógico de existir y al mismo tiempo coexistir junto con el "Todo", es posible mirar dentro de la mente propia tal como dentro de la mente de los demás con tal nivel de acierto que lograremos reforzar la noción que tenemos sobre el concepto de Egregor o Mente Colectiva o Supra-consciente, es posible mirar hasta el más mínimo estímulo eléctrico proveniente desde el mundo sensible como para decidir qué hacer con esa pulsión tan arcaica que nos recuerda persistentemente que somos animales embebidos en humanos, es posible mirar el paso del tiempo hasta en su más mínima expresión sobre cualquier sujeto u objeto en los que colocamos nuestra mirada mental, es posible mirar hasta la emisión de energía cuántica de cualquier tipo de materia en forma de pulsiones discretas y a la vez constantes, es posible mirar todo lo que la vista no es capaz de ver... y mucho más.
Y he mirado algo que ningún ser humano que no haya descubierto su propia e innata capacidad de mirar, podría llegar a entender, y por consiguiente, a creer. He mirado lo que mi vista, mis ojos, nunca serán capaces de ver. He mirado una civilización, la cual yace, desde hace mucho tiempo, debajo de la superficie y por entre las laderas de las montañas del planeta Marte. Mucho tiempo ha pasado desde que allí se establecieron y evolucionaron para llegar a ser en lo que hoy en día se han convertido. Son multiplanetarios, viajeros imparables y conquistadores precavidos, pero, más que nada, exploradores, por lo que solo conquistan los lugares en donde no exista vida inteligente en desarrollo, es decir, ellos no se establecen encima de otras civilizaciones que existan en otros planetas, sino que cohabitan solo si ambas civilizaciones llegaran a acuerdos basados en una única premisa; la paz y el progreso en conjunto. Pero antes de cohabitar, debe existir un "Primer Contacto", y esto último significa un enorme desafío. Está demás expresar, que dicho planeta debe ser lo más similar a uno de Clase "M", tal como lo es la Tierra, para que la vida haya tenido la oportunidad de prosperar allí.
El primer contacto, tal y como lo he podido mirar con mi mente, y como lo mencioné antes, se conforma como un magnánimo desafío de previas infiltraciones de parte de aquella especie que mi mente ha descubierto en Marte, (Marcianos ellos, y Extraterrestres para nosotros), pero dichas infiltraciones no tienen ninguna relación con intenciones dañinas, sino que, todo lo contrario, debido a que aquellas poseen sus propios protocolos perfectamente determinados y adaptados para cada evento de "Primer Contacto", los que decantan en normas claras y fundamentales que impiden que la civilización a contactar, -la que en este caso sería una Extramarciana-, se percate de la presencia de la civilización que desea hacer el contacto, -y que en este caso es esa civilización marciana que mi mente ha sido capaz de mirar-, y a la vez, si el contacto resulta no ser viable, no se alterará el orden interno de dicha civilización objetivo, porque, en definitiva, los habitantes de Marte basados en una mente multiplanetaria, en su intento de Primer Contacto, si este no resulta viable, la civilización que debería ser contactada no llegará a sentir la presencia, ni la más mínima existencia siquiera, de aquellos "conquistadores" marcianos, o más bien, "co-habitadores" pacíficos del planeta rojo.
Pero, llegó el día en el que la civilización de Marte ha hecho su Primer Contacto con la civilización denominada por ellos, Extramarciana.
Pese a que las normas son estrictas en lo referente a la no interferencia, hasta poder arribar a una conclusión, que será la que determine que el primer contacto pueda ser factible; lo cual deberá ser, además de lo anterior, provechoso para ambas civilizaciones y en el nombre de la paz y del progreso de ambas por igual; el propio contacto en si mismo se debe dar en un progresivo auto-descubrimiento por parte de la civilización a contactar, en oposición a todo intento de contacto explícito por parte de la civilización de Marte; es decir, la civilización Extramarciana debe descubrir por si misma, la existencia de una posible civilización que desea establecer algún tipo de contacto con ella, y aquel proceso de autodescubrimiento deberá ser lo único que, durante el comienzo del pre-contacto, ambas civilizaciones tengan en común. Y las semillas plantadas por la primera, por las propias manos de la civilización marciana; con el objeto de que la civilización objetivo se percate, lentamente, de la intención pacífica de que otra civilización desea ponerse en contacto con aquella; dichas semillas deben ser muy separadas en el tiempo entre la primera y cada una de las semillas subsiguientes, de manera tal de que la civilización objetivo vaya asumiendo, al principio de manera inconsciente y posteriormente de una manera más consciente y abierta, de que alguien de "allá afuera" quiere entablar una amistad duradera con ellos. Las semillas son colocadas por la civilización que mi mente ha descubierto en Marte, pero la percepción que generan dichas semillas en la mente colectiva de la civilización objetivo o Extramarciana, deberá parecer que es algo que proviene solamente desde el núcleo de su civilización, con el objetivo de hacer germinar en ellos mismos, una poderosa idea de contacto con alguna civilización fuera de su propio mundo, y con la que, quizás y con el tiempo, ellos pudiesen hacer su "propio contacto", sabiendo que el impulso para querer contactar a otros seres de otros mundos, ha sido conformado gracias a aquellas semillas "enterradas" por los "infiltrados de Marte", quienes han sido preparados para las fases que fueron preliminares al Primer Contacto.
Luego de mucho tiempo de infiltraciones destinadas a verificar que las semillas plantadas por la civilización de Marte, hayan dado sus frutos; es decir, que en el seno de la conciencia colectiva de la civilización -o planeta- objetivo o "Extramarciana", deberán haber brotado ideas "propias" con intenciones dirigidas hacia el contacto con inteligencias biológicas de otros Orbes; con lo que, cuando aquellos frutos estén "a punto", luego se procede a dar comienzo a la fase siguiente en lo que respecta al protocolo destinado al primer enlace entre civilizaciones diferentes que habitan mundos similares; por no decir iguales, en cuanto a la atmosfera, al tamaño, a la biodiversidad, a la cercanía con su propia estrella, etcétera.
Y he podido mirar, entonces, que la civilización Extraterrestre; es decir, que la civilización marciana que ha encontrado otro mundo habitado por una civilización Extramarciana inteligente; ha aplicado el protocolo de Primer Contacto a rajatabla, con resultados más que impactantes, porque, como expresa el Protocolo Marciano, aquellas semillas plantadas discretamente, han hecho que la civilización objetivo se haya dispuesto a hacer todo cuanto esté a su alcance dentro de su civilización de manera tal de que cada cosa que la conforma lleve la idea implícita de ser, ellos también multiplanetarios, por lo que, cada uno de sus inventos, en cualquier ámbito del saber y del conocer, ha estado enfocado en aquella dirección, y por lo tanto, si todo se hace con base en una sola dirección, por más variopintas que sean sus producciones y sus construcciones, sea lo que sea que ellos realicen, siempre los dirigirá hacia el innegable e inevitable momento del contacto con la civilización de Marte. En el instante en el que la semilla del pre-contacto ha sido plantada; por parte de los Extraterrestres -si los miro desde la perspectiva de la civilización de la Tierra-, es decir, plantada por la civilización marciana dentro del núcleo social mismo de la civilización Extramarciana -si la miro desde la perspectiva de la civilización de Marte-; entonces, al haber sido plantada la semilla del pre-contacto, se abrieron las puertas para una larga, progresista y pacífica relación entre dos mundos muy similares. Con lo anterior, se creó entonces, la necesidad de contacto con otras civilizaciones, dentro de una civilización que nunca ha conocido una, más que a ellos mismos. Es en este punto, luego de mucho tiempo, cuando la civilización de Marte comenzó a mostrarse lentamente ante los ojos impresionados de la civilización objetivo, porque en las mentes de estos ya estaba implantada una necesidad "autóctona" de contacto, y por lo tanto, incontables avistamientos "inexplicables" se comenzaron a materializar por todas las mentes de la civilización objetivo, es decir, por todas las almas que conforman dicha civilización Extramarciana, hasta que llegase el momento en el que, la cantidad de avistamientos, -fugaces al principio y más duraderos con el paso del tiempo-, fuesen tantos, que la idea de una civilización Extranjera a los ojos de los Extramarcianos, fuese una posibilidad casi innegable. Y entonces, llegado el glorioso momento en el que la civilización de Marte, -la que a nuestros ojos son Extraterrestres-, lograra plantar y hacer florecer las semillas de ideas multiplanetarias en la mente colectiva de la civilización objetivo, -la que a los ojos de aquellos son Extramarcianos-, y que luego comenzarán a darse a conocer por medio de avistamientos esporádicos, pero constantes y con más tiempo de visibilidad; llegado aquel momento de gloria, el verdadero Primer Contacto ya era una realidad en la mente de ambas civilizaciones; en la primera, en la civilización artífice fue de manera consciente, mientras que en la objetivo fue de manera inconsciente. Lo importante es el acercamiento, la unión, la paz, el progreso y el amor, y si para obtener lo precedente es necesario realizar todo lo que ha hecho la civilización de Marte, pues, en este caso, el fin ha justificado, y de sobremanera, a los medios para obtenerlo.
El Primer Contacto ha sido un éxito. Actualmente, dos civilizaciones cohabitan pacíficamente, y no solamente en el mundo de la civilización contactada, en el de los Extramarcianos, sino que también se ha formado un puente bidireccional entre Marte y el planeta de aquellos, por lo que Marte tiene Extramarcianos, así como el planeta de estos tiene a Marcianos. Ambas civilizaciones, desde el punto de vista de la civilización terrestre, son Extraterrestres... y he podido mirar que ya tienen pensado plantar aquella semilla de descubrimientos en nuestra civilización... Falta poco... muy poco.